Novena a Nuestra Madre la Virgen de los Dolores: Día 8º
De la Soledad de Nuestra Señora
Tristísima y dolorosísima Virgen María, mi Señora, ya queda vuestro Unigénito Hijo, mi Señor Jesucristo, sepultado; vos Señora os volvéis sola sin la luz de vuestros ojos y sin la vida de vuestro corazón. Todos los Espíritus del cielo os acompañen oh María dolorosísima, que a mi me pesa de haberos dado tantos pesares con mis culpas; yo he sido, Madre amantísima, el malhechor y cruel homicida; yo con ellas he quitado la vida a vuestro Hijo dulcísimo. A vuestros pies me postro porque me valga vuestra piedad aun habiendo sido tan cruel contra Vos, en vuestra grande misericordia confío y espero, por los dolores mismos que he ocasionado, el perdón que no merezco. Propongo, Señora y Madre afligidísima, firmemente la enmienda y de empezar nueva vida, para que me valga vuestro amparo; y alcanzadme el favor particular que os pido, si ha de ser para gloria de Dios y bien de mi alma. Amén.
Octavo día de la Novena a Nuestra Señora de los Dolores.
ORACIÓN:
Dolorosísima y purísima Virgen María, Madre del mejor Hijo, y la más afligida de todas las madres del mundo, postrado a vuestros pies, os ruego humildemente, Señora, si este favor que pido ha de ser para gloria de Dios y bien de mi alma, me le alcancéis de su divina piedad, y que siempre haga en todo su santísima voluntad.
OCTAVO DOLOR
De la Soledad de Nuestra Señora
Tristísima y dolorosísima Virgen María, mi Señora, ya queda vuestro Unigénito Hijo, mi Señor Jesucristo, sepultado; vos Señora os volvéis sola sin la luz de vuestros ojos y sin la vida de vuestro corazón. Todos los Espíritus del cielo os acompañen oh María dolorosísima, que a mi me pesa de haberos dado tantos pesares con mis culpas; yo he sido, Madre amantísima, el malhechor y cruel homicida; yo con ellas he quitado la vida a vuestro Hijo dulcísimo. A vuestros pies me postro porque me valga vuestra piedad aun habiendo sido tan cruel contra Vos, en vuestra grande misericordia confío y espero, por los dolores mismos que he ocasionado, el perdón que no merezco. Propongo, Señora y Madre afligidísima, firmemente la enmienda y de empezar nueva vida, para que me valga vuestro amparo; y alcanzadme el favor particular que os pido, si ha de ser para gloria de Dios y bien de mi alma. Amén.
7 AVES MARÍA Y 7 GLORIAS
PÍDASE LA GRACIA QUE SE DESEE ALCANZAR
ORACIÓN FINAL :
Soberana Virgen María y mi amantísima Madre, y de todos los pecadores, que tenéis en el ara de la Cruz a vuestro Unigénito Hijo, ofrecedle al Eterno Padre en agradable Sacrificio, para remedio de los hombres y satisfacción entera y superabundante de sus culpas, y pedidle, Señora, que mire a su Hijo crucificado, y a Vos amantísima Madre suya traspasada de dolor; y que se duela de los infieles y herejes y los traiga al gremio de su santa Iglesia. Amén.
A tu alma atravesará una espada de dolor dijo a María, Simeón.
Ruega por nosotros Virgen dolorosísima.
R. Para que nos hagamos dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
Señor Dios, en cuya pasión según la profecía de Simeón, traspasó una espada de dolor a la dulcísima alma de la gloriosa Virgen y Madre María, concede propicio que nosotros los que traemos a la memoria, venerando sus dolores y su pasión por sus gloriosos merecimientos, y por las súplicas e intercesión de todos aquellos Santos que fielmente la acompañaron al pie de la Cruz, consigamos el feliz estado de pasión por nuestro Señor Jesucristo. Amén.