Misa in memoriam de Gregorio Fernández

Al cumplirse el 384 aniversario de la muerte del insigne imaginero Gregorio Fernández, la Cofradía Penitencial de la Santa Vera Cruz ofreció una Eucaristía por el eterno descanso de su alma.

A la Misa ‘in memoriam’ asistió la Abadesa del Convento de Santa María la Real de Huelgas, como representante de las Hermanas Bernardas, cofrades de honor de la Penitencial.

Fernández nace en 1576 en Sarria (Lugo). Comienza su formación artística en el taller de su padre. En 1600 llega a Valladolid, entrando a trabajar en el taller de Francisco del Rincón.

Profundamente religioso, fue cofrade de nuestra Penitencial, no hacía una sagrada imagen sin antes prepararse “con oración, ayuno, penitencia y comunión”, pidiendo a Dios le “diera gracia para plasmar en madera su arte”.

Para la Vera Cruz hizo tres grandes pasos, que se convertirían en cuatro: Atado a la Columna, Descendimiento, Virgen de los Dolores y Ecce Homo, también conocido como Cristo de la Caña, del que se cumplen 400 años de su hechura.

Es conocido que el Rey Felipe IV dijo de Fernández: “El escultor de mayor primor que hay en estos mis reinos“.

Gregorio Fernández falleció en Valladolid el 22 de enero de 1636.

DEP