Martes Santo 2017

La iglesia volvió a estar abarrotada durante las doce horas en que estuvo abierta.

A las 22 h. se autorizó la salida de nuestro Cristo Atado a la Columna a la Peregrinación de la Promesa, escoltado por dos directivos de la Vera Cruz. Regresó sin novedad, pese a lo desmesurado y hostil del recorrido para un “gregorio fernandez” del Siglo XVI, cruzando dos veces la Esgueva. Múltiples crucitos acompañaron a su paso durante la procesión.

Mientras, la Virgen Dolorosa fue elevada a sus andas para los encuentros del Miércoles Santo. Perfecta la coordinación entre montadores, carroza y andas, que hicieron un trabajo perfecto en un tiempo record.

La iglesia volvió a estar abarrotada durante las doce horas en que estuvo abierta.

A las 22 h. se autorizó la salida de nuestro Cristo Atado a la Columna a la Peregrinación de la Promesa, escoltado por dos directivos de la Vera Cruz. Regresó sin novedad, pese a lo desmesurado y hostil del recorrido para un “gregorio fernandez” del Siglo XVI, cruzando dos veces la Esgueva. Múltiples crucitos acompañaron a su paso durante la procesión.

Mientras, la Virgen Dolorosa fue elevada a sus andas para los encuentros del Miércoles Santo. Perfecta la coordinación entre montadores, carroza y andas, que hicieron un trabajo perfecto en un tiempo record.